La ampliación del cepo cambiario fijada por el Banco Central volvió a asestarle un duro golpe a las inmobiliarias, que entienden que la medida profundizará la parálisis que sufre el sector.
El rubro viene acumulando números negativos como nunca antes, sobre todo en la Ciudad de Buenos Aires. Y entre los comercializadores crece la preocupación ante la falta de indicios políticos que permitan imaginar una flexibilización del control cambiario en el corto o mediano plazo.
Muy por el contario, entre los principales jugadores del negocio predomina la idea de que el escenario de trabas se extenderá hasta incluso bien entrada la gestión de Alberto Fernández. En simultáneo, expertos alertan sobre una dramática pérdida del poder de compra a partir del muy bajo monto de dólares que pueden adquirirse de forma oficial.
En concreto, los u$s200 mensuales que habilita el cepo hoy no permiten cubrir ni siquiera el 10 por ciento del valor promedio que cuesta el metro cuadrado, en promedio, de una vivienda usada en la Ciudad de Buenos Aires. Todo esto hace prever a los empresarios del sector que 2019 cerrará como el peor año del que se tenga registro en términos de escrituraciones en la Ciudad.
«El cepo vino para quedarse. Incluso seguramente se profundizará más», dijo Francisco Altgelt, vicepresidente de la comercializadora homónima, ante la consulta de iProfesional.
«Durará bastante. Hasta que se estabilice la economía y se generen dólares genuinos para equilibrar las finanzas. Que eso cambie dependerá de muchas variables pero no ocurrirá antes del mediano plazo. Dependerá del nivel de reservas y el crecimiento de la actividad económica», expuso, en un tono similar, Diego Migliorisi, socio gerente de Migliorisi Propiedades.
En diálogo con este medio, el broker dio por descontado que el cepo se mantendrá incluso más allá del 2020. Y esto será un duro condicionante para la actividad. «Creo que en los próximos dos años habrá restricciones, ya que la idea que primará será la de utilizar los dólares genuinos para volcarlos a la producción nacional», argumentó.
Entre los referentes del ámbito inmobiliario abundan las voces que dan cuenta de una perspectiva negativa para el sector, pensando ya en el año que viene. Marcelo Di Mitrio, titular de Di Mitrio Inmobiliaria, anticipó que 2020 «encontrará al mercado debatiéndose entre una mayor caída en los precios de cierre de ventas y un nivel de actividad en sus mínimos históricos, aunque nadie garantiza que no pueda caer todavía más».
«El endurecimiento del cepo es una pésima noticia para el sector inmobiliario, que en la Ciudad de Buenos Aires viene cayendo de forma sistemática desde 2018 y todavía sin encontrar su piso en el nivel de actividad. Las mayores restricciones llegan para complicar más a un mercado sumamente comprometido, no sólo por su bajo nivel de actividad sino por su stock», comentó a iProfesional.
Pronósticos sombríos
«Lamentablemente, volvemos a un mercado con distintos tipos de cambio y eso siempre deriva en la parálisis de la actividad que, de por sí, ya venía completamente afectada. El año está perdido en términos de comercialización, el problema es que no hay certezas de lo que viene. Todo hace suponer que el cepo fuerte seguirá por muchos meses», dijo a iProfesional un broker con operaciones concentradas en Palermo y Recoleta.
Otro comercializador consultado opinó de manera similar: «Las ventas ya están detenidas y este año es peor que el anterior, que fue pésimo. Quien no tenía dólares suficientes para cerrar una operación, entonces ahora queda directamente afuera del mercado. Si el cepo se extiende más allá de junio vamos a hablar de cierres de comercios».
Desde la Cámara Inmobiliaria Argentina (CIA) anticiparon que ya tiraron líneas con el equipo de Alberto Fernández para ver cómo seguir: «Ya solicitamos una reunión con el nuevo gobierno con la idea de tener precisiones de antemano. Pedimos juntarnos directamente con Alberto Fernández», confió a iProfesional Alejandro Bennazar, presidente de la CIA.
En diálogo con este medio, Armando Pepe, presidente del Colegio de Corredores Inmobiliarios de la Ciudad de Buenos Aires, también se mostró preocupado por el presente de la actividad: «El lapso de acá a diciembre se hará eterno. El mercado está paralizado y no sabemos cuál será el plan de Fernández para el sector. Septiembre cerró con una caída en las escrituras del 19 por ciento respecto de igual mes pero del año pasado, que también había sufrido una baja similar. La caída de octubre será incluso peor», expresó.
Entre los consultores ratifican que el acceso a los dólares se mantendrá acotado, y también prevalece la coincidencia de que nada permite suponer que las trabas dejarán de existir en la primera etapa de la nueva gestión.
«La pregunta es si el próximo gobierno vendrá con un plan hecho para flexibilizar. Por lo pronto, 2019 cerrará como el peor año en materia de escrituras desde que se llevan las estadísticas en la Ciudad de Buenos Aires, que arrancó en 1998», sostuvo ante iProfesional José Rozados, CEO de Reporte Inmobiliario.
«Hasta este ejercicio, el año de mayor caída había sido 2014. Para sobrevivir, las inmobiliarias han tenido que restringir al máximo sus gastos. El cepo ampliado complicó todavía más la situación de un sector que ya venía muy golpeado», añadió.
Fuente: iprofesional/ Jornada
Sin crédito y con cepo cambiario, las inmobiliarias entrarán en una etapa complicada