Continuando con el artículo del mes anterior acerca de la incidencia del personal en la gestión de toda empresa inmobiliaria, nos referiremos a otros componentes de las diversas tareas que tendrán que realizar y algunas recomendaciones que aplicadas repercutirán favorablemente en el quehacer   cotidiano. En el anterior análisis evaluamos  los temas: Roles del personal dentro de la organización;  la presentación personal creando imagen de   la organización;  disciplina como instrumento de  funcionamiento integral. Continuaremos viendo

Motivación: Indispensable para desarrollar tareas cotidianas sin caer presas de la rutina perniciosa. Para procrearla se tendrán en cuenta factores como el clima laboral que se nutre desde una buena dirigencia.     Se incrementa el compromiso por parte de los integrantes del equipo, lo que fomenta su participación y fidelización al propio grupo, distribuyendo esfuerzos y  responsabilidades. La motivación optimiza resultados y disminuye esfuerzos; potencia las gestiones creativas; beneficia emocionalmente al personal. Finalmente se transmite al público y a clientes en   forma silenciosa y positiva que se percibe en cuanto se ingresa a la oficina, se atiende el teléfono o se recibe el e-mail como respuesta.      

Clima laboral: Partimos de la premisa que el personal pasa más tiempo en el cumplimiento de sus tareas que en  el  propio hogar. Por tal, el clima a ofrecer debe comenzar a partir de los espacios en los cuales debe el personal desarrollar su actividad: cómodos; aseados; prolijos – lo que debe ser mantenido por cada uno de los integrantes – junto a proponer música y aromatización adecuadas. Planta de interiores le darán un  toque de naturaleza  que optimizará la ambientación no solo al personal sino también al público que ingrese. Dentro de este cuadro y potenciada la motivación en el equipo se alcanzará  cohesión en los actores y propiciará la creatividad necesaria  frente a los constantes cambios socio-culturales que enfrentarán. Comentario aparte

merece este tema aplicado a los equipos de venta (promotores; productores; tasadores; vendedores; asesores). Si bien deben encontrar en las oficinas los espacios adecuados y bien presentados para atención de clientes, LOS NEGOCIOS ESTAN EN  LA CALLE y por lo tanto debe evitarse que el confort de la oficina “robe” la energía de quienes son responsables de generar negocios.   

Capacitación permanente será la consigna que motive a toda organización.  Imprescindible para mantener al personal actualizado y asumiendo adecuadamente   el rol que la empresa le confiere. No solo los cambios socio-culturales de la sociedad y las incidencias en las preferencias habitacionales  deberán ser interpretados para una mejor orientación en la  toma de decisiones de los clientes, sino también a la  incorporación de las novedosas técnicas de comunicación que optimizan el

acercamiento inmobiliaria/mercado y por tal incrementa el potencial de negocios. Le facilitará  además interpretar y actuar según  las tendencias poblacionales. 

Premie!!  Los premios retribuyen esfuerzos. Humanizan a las organizaciones. El personal distinguido y motivado alimenta su creatividad. El premio no debe ser económico solamente. Becar Curso entre el personal; o un bonus para  compra de material escolar a sus hijos; o 2 cenas en restaurante local; o tour fin de semana; o entradas para espectáculo teatral; que se otorgue por cumplimiento de objetivos. Es decir que premien esfuerzos.

Prof.-Jorge Aurelio Alonso

Asesor Académico del

Instituto de Capacitación de la Cámara Inmobiliaria Argentina