Como se observa, desde hace dos años este problema se complica más cada vez más. Es evidente que no surgen alternativas apropiadas en busca de soluciones y tampoco existen acuerdos ni interés en su mayoría de parte del Gobierno ni del Congreso que abran el camino para ayudar a la sociedad a adquirir un lugar donde vivir según las posibilidades y los valores.

Acerca de este tema central en la vida cotidiana, el presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina (CIA), Alejandro Bennazar, considera que “siempre mencionamos la importancia de construir una mesa de trabajo entre todos los sectores. Tenemos que disponer de datos, posibilidades de acceso al crédito, apoyo del estado, entre otros temas. Si es cierto que, en otros momentos del país era más sencillo y se lograba poner de acuerdo entre las partes interesadas para definir los valores de cada unidad. En ese sentido considero que actualmente no vemos esa posibilidad ya que hay muchas instituciones con posturas diferentes. Tampoco se logró en Diputados. De hecho, en 2022 nos escucharon un total aproximado de 160 voces y no se pudo resolver. Esperemos que en 2023 se logre”.

Con relación a cómo se ofrecen en estos días, tanto la demanda como la oferta, Bennazar considera que “hace cuatro años una propiedad durante 90 días esperaba un inquilino, abastecido el mercado con la ley anterior. Hoy, un inquilino está con lista de espera en busca de una propiedad. Esto implica que este mercado tiene nula oferta en la ley actual”.

Considerando los cambios que se podrían aplicar, de acuerdo con las necesidades de la gente, el directivo explica que “habría que aplicar una cirugía menor. Es decir, contratos de tres años, reducirlos como máximo a dos. Actualización máxima pensada cada seis. Respecto de los índices alternativos, CVS, sin inflación. Sin embargo, los meses que vienen en esta situación serán cada vez más complejos siempre que no se tomen medidas”. Y agrega. “Se podrían reunir en el Congreso, pero tendría que convocar el Estado”. Es interesante saber qué sucede con la gente que vence su alquiler y quiere continuar con la misma propiedad. “En ese caso, si el propietario desea seguir alquilando en un pacto de partes y logran un acuerdo podrían continuar. En el caso al revés, buscan tomar un alquiler y se aplica una negociación de mercado”.

Finalmente, respecto de poner en marcha un cambio radical sobre este tema tan delicado, Alejandro Bennazar sostiene que “es muy difícil sin datos y mesa de trabajo con todas las partes involucradas. En el área de CABA deberían al corredor profesional inmobiliario ponerlos a trabajar para conseguir soluciones, pero para esto tenemos que recuperar los honorarios, somos los únicos que podremos ayudar a revertir esta situación. Lo que sucede es que lograron el desmedro del mercado”.

compraventa

Por su parte, Marta Liotti, presidente de CUCICBA, aporta su conocimiento sobre el tema alquileres. Al respecto, opina: “El mercado se encuentra muy golpeado, sufriendo una crisis histórica, en la que se conjugan las consecuencias de la actual Ley de Alquileres como la grave situación económica del país. Del lado de los inquilinos, resulta casi imposible conseguir unidades que se adapten a sus necesidades a valores acordes con sus ingresos, mientras que los propietarios que vuelcan sus inmuebles al mercado locativo tienen una rentabilidad que se encuentra en sus pisos históricos. Esta grave realidad no tendrá un principio de solución hasta que no se modifique la actual Ley, pero requerirá también de una estabilización económica para que el mercado vuelva a la pujanza que mostró en épocas pasadas”.

Añade que “nuestra entidad trabaja incansablemente, por su parte y en conjunto con todo el resto de las instituciones del sector, a fin de aunar voluntades en pos de avanzar en la solución de la terrible problemática que afecta a las familias argentinas. Fue justamente gracias al empuje y liderazgo de nuestro Colegio que el año pasado se llegó a la presentación de un Proyecto de Ley para reformar la actual norma que rige el mercado de alquileres. Se proponía modificar los dos puntos más conflictivos de la actual Ley: la duración del contrato (la propuesta es retornar a los dos años) y el modo de actualización de los valores (dejándolo al libre acuerdo entre las partes). Esta propuesta se dio hace más de un año, pero, tristemente, la política sigue sin avanzar en su tratamiento”.

Frente a la pregunta si es posible volver a discutir estos temas en la Cámara de Diputados, Liotto opina: “Desde nuestra entidad hemos tenido contacto con referentes de la mayor parte del arco político, y todos son conscientes de que la Ley ha fallado y que es necesario un cambio para que el mercado se recupere. El problema es hacia dónde buscan dirigir ese cambio los diversos referentes y fuerzas políticas. Nosotros confiamos en que, eventualmente, será posible lograr los acuerdos necesarios para que la situación encuentre una solución. Para eso, damos a conocer a todos los dirigentes y funcionarios con los que tomamos contacto con la realidad del mercado que ven (y sufren) día a día los inquilinos, propietarios y profesionales inmobiliarios, confiando en que la fuerza de los datos de esa situación se sobreponga a los posicionamientos político-partidarios”.

Y agrega: “No se puede saber qué ocurrirá con los inmuebles; su destino lo decidirá cada propietario. Lo que seguramente sucederá con el mercado si más y más propietarios retiran sus unidades, se profundizará el proceso de subas de cánones locativos, ya que, necesariamente, una menor oferta implica la suba de cualquier bien o servicio. Paralelamente, y si bien la compraventa ya se encuentra en una situación de sobreoferta respecto de sus niveles históricos, si continúa la tendencia del paso de unidades del ámbito locativo a la venta, ese mercado continuará con precios bajos, dificultando su recuperación”.

La presidenta del Colegio Inmobiliario comenta que “con relación a la oferta está en mínimos históricos y continúa cayendo. La estimación que surge es que de no mediar ningún cambio normativo, en pocos meses podríamos ver un mercado locativo sin unidades en oferta en la Ciudad de Buenos Aires, con la consecuente suba de precios que implicará. Respecto de los valores actuales explica que “es muy difícil brindar números generales, ya que los valores son sumamente variables en cada barrio. Si tomamos, por ejemplo, algunas de las zonas más buscadas de la Ciudad, observamos que los monoambientes se ofrecen por encima de los $100.000 mensuales. En barrios tradicionalmente de clase media, esas mismas unidades podrían estar apenas por debajo de ese número. Con esos pisos para las unidades más chicas, es fácil imaginarse en qué niveles podrían estar las unidades familiares, de tres ambientes o más”.

Por: ADRIANA ANZILLOTTI ON 31 MARZO, 2023

Fuente: Argenprop